Esta silla compartía espacio con el escabel que enseñé el otro día.
La compré en un arrebato en una tienda de segunda mano hace tiempo aunque el tapizado no pegaba con el entorno. Así es que la he tapizado a juego con el escabel.
He repintado la silla con la misma pintura a la tiza.
Vuelta a pintar las rayas iguales a las del escabel. Tapizar y montar el respaldo me ha costado un triunfo, pero ahora aunque no se parecieran las piezas, las he hermanado con el tapizado.
Con este proyecto participo en el finde frugal de Marcela, pasaros por allí que hay verdaderas maravillas